
Los vehículos motorizados están prohibidos en las islas por lo que hay que explorar su territorio a pie, en bicicleta, en caballo o en burro, así que cogimos un calesa para recorrer toda su isla, y visitar el monasterio ortodoxo de San Jorge.





Al regreso cogimos el ferry lento que va parando en las otras islas: Kinaliada, Burgazada, Heybeliana hasta llegar a Estambul.


